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Unidad 1


Unidad introductoria
Características generales de la Europa Moderna.
 El Antiguo Régimen
 Evolución del sistema capitalista
 Los cambios en el pensamiento
Unidad 1
El ciclo revolucionario.
 Concepto, componentes político-sociales y económicos
 La revolución Gloriosa y el nacimiento de la monarquía parlamentaria
 Revolución de las colonias inglesas y la construcción del sistema republicano y federal
 Revolución Francesa: características generales del proceso y su trascendencia
 Los Derechos Humanos de primera generación
 De la Europa napoleónica al Congreso de Viena

Durante los siglos XV y XVI termina la Edad Media y comienza la Edad Moderna, una época muy especial en la cual se dio un cambio en la mentalidad cultural y política de la población europea. 

Los cambios más importantes que se dieron en este período tienen que ver con esferas muy importantes de la vida en sociedad: a nivel político se consolidó el absolutismo monárquico; a nivel social se produjo el ascenso de la burguesía; a nivel cultural se produjo un cambio de mentalidad que dio origen al antropocentrismo (el hombre es ahora el centro de todas las reflexiones y estudios) de la mano del Renacimiento y,finalmente, en lo religioso tuvo lugar la Reforma y la Contrarreforma. 


Transición de la Edad Media a la Época Moderna

 
TRANSICIÓN DE LA EDAD MEDIA A LA ÉPOCA MODERNA
 
FINES DE LA EDAD MEDIA (Baja Edad Media)
COMIENZOS DE LA ÉPOCA MODERNA
(Renacimiento)
¿Cuándo?
Siglos XII a XV
Siglos XV a XVI
¿Dónde?
Europa Occidental
Europa Occidental
ORGANIZACIÓN SOCIAL
Sociedad estamental. Grupos cerrados según el nacimiento y la función.
No trabajan, cobran y no pagan impuestos.
1. Clero: alto y bajo
2. Nobleza: de sangre
Trabajan y pagan impuestos:
3. Campesinos: libres o siervos
Burgueses: artesanos y comerciantes (ciudad)
¿Dónde vivían?
90% en el medio rural
10% en las ciudades (crecen a partir del siglo XII)
¿Cómo se vinculaban los grupos?
Relaciones de dependencia:
Entre nobles: vasallaje
Entre nobles y campesinos: servidumbre


 
ORGANIZACIÓN SOCIAL

Se mantiene la SOCIEDAD ESTAMENTAL
Se agrega la nobleza togada (venta de cargos)


La burguesía aumenta en número hasta llegar a ser el 12% de la población total.


Continua el crecimiento urbano


Se mantienen las relaciones de dependencia.
ORGANIZACIÓN ECONÓMICA
¿Qué actividades realizaban?
AGROPECUARIA: base de la economía
Agricultura (cereales)
Ganadería (ovejas, cabras)
ARTESANÍAS: en feudos y ciudades
COMERCIO: escaso desarrollo
FINANZAS: escaso desarrollo
ORGANIZACIÓN ECONÓMICA
Agropecuaria continúa siendo la base de la economía.
Innovaciones en técnicas agrícolas.
Aumenta la producción artesanal
Crecimiento del comercio
Crecimiento de las finanzas
ORGANIZACIÓN POLÍTICA
¿Quién tiene el poder?
FRAGMENTACIÓN TERRITORIAL DEL PODER: El Señor feudal concentra diferentes poderes: hace leyes, cobra impuestos, administra justicia, acuña la moneda, dirige el ejército.
ORGANIZACIÓN POLÍTICA
CONCENTRACIÓN TERRITORIAL DEL PODER EN MANOS DEL REY. NACE EL ESTADO MODERNO.
El rey comienza a recuperar y a concentrar el poder: hace leyes, cobra impuestos, dirige ejércitos.
Esto no significa que desaparece el sistema feudal, los nobles mantienen algunas funciones en sus feudos.
ASPECTO CULTURAL
¿En qué creían?
TEOCENTRISMO: La vida de los hombres tenía como centro a Dios (la religión). La Iglesia explicaba todo lo que pasaba.
¿Cómo se expresaba?
La Iglesia Católica religión de la mayoría de los europeos.
ASPECTO CULTURAL
Se mantiene pero surge elANTROPOCENTRISMO: El hombre confía en la razón, explica el mundo a través de su estudio, surge el individualismo, se hacen responsables de sus creaciones.
Reforma religiosa: surgen las iglesias protestantes. Renacimiento artístico y cultural.
Grandes descubrimientos geográficos.

 
 





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Cambio de pensamiento de la Edad Media a la Edad Moderna

 
 

La Edad Moderna posee un carácter transformador, paulatino y
decisivo, respecto de las estructuras económicas, sociales, políticas e ideológicas propias de la Edad Media. El ritmo de los cambios son lentos, por lo tanto no hubo un paso brusco de la Edad Media a la Edad Moderna, sino que hablaremos de una transición, ya que cabe destacar que los principales fenómenos históricos asociados a la Modernidad, como son el Capitalismo, el Humanismo, los Estados Nacionales, etc. venían preparándose ya algunos siglos antes. Es importante destacar en lo artístico al Renacimiento, en lo religioso la Reforma Protestante y en lo filosófico el surgimiento de una filosofía secular, que reemplazó a la Escolástica medieval y proporcionó un nuevo concepto del hombre y la sociedad.

Concepto de Hombre en la Edad Moderna


 

El espectro intelectual del Renacimiento se conoció con el nombre de Humanismo. Durante este período se reafirma el valor del hombre y se le considera como el protagonista de la historia, exaltándose por supuesto la idea del individualismo. Nace entonces el concepto de 'antropocentrismo', o el hombre como centro de todas las cosas. Se plantea que el hombre es  importante, su inteligencia es el valor superior y que está al servicio de la fe que le une con el Creador. 


La Ciencia en la Edad Moderna


En la Edad Moderna existía un concepto de Ciencia directamente relacionado con la exploración empírica de la naturaleza y se dice que la revolución científica es un acontecimiento que no se aboca solo al mundo de los objetos, sino que se convierte al espíritu en un medio para llevar a cabo su propio conocimiento, aunque por lo menos hasta la Ilustración se convivía con elementos o situaciones muy relacionadas con la magia. A raíz de esto, lo sobrenatural formaba parte de la vida cotidiana, y era aceptado por casi todas las esferas sociales. La Ciencia se vio muy marcada por los llamados 'Choques culturales', en los que las costumbres, inventos y descubrimientos eran compartidos entre europeos, americanos, asiáticos y africanos. También son importantes para el desarrollo de la Ciencia la Era de los descubrimientos, las que poco a poco daban paso a expediciones con fines netamente científicos, racionalizando la búsqueda de recursos y la explotación utilitaria del conocimiento.





















REFORMAS RELIGIOSAS

Se le conoce como reforma protestante al movimiento que tuvo su punto culminante en el siglo XVI y que llego a producir la separación de la Iglesia Protestante de la Iglesia Católica Romana. Esta reforma surge a partir del 1514 como producto de: las contradicciones ideológicas en la misma Iglesia Católica; el alto grado de corrupción existente en la misma; y su dedicación a la intrigas por el poder económico y político de la época.

El mayor impulsor del Movimiento de la Reforma Protestante fue Martín Lutero. Pero ¿Que llevo a este a iniciar el Movimiento de la Reforma Protestante? Dos Contextos, el primero era la situación de crisis por la que estaba pasando la iglesia, y para colmo, la venta de indulgencias (pagar por la salvación); y el otro era el proceso de encuentro con Dios por el cual Lutero estaba pasando.
Martín Lutero escribió 95 tesis en las que atacaba la venta de indulgencias y esbozaba lo que seria su doctrina sobre la salvación por la fe.
Alguna de las consecuencias que le siguieron a Lutero por su postura fueron:
- Excomulgado por el papa León X - Fue declarado desterrado por parte del emperador Carlos V

CAUSAS

Esas causas se pueden clasificar de la siguiente manera:

Religiosas

- El descontento generalizado por la corrupción y la inmoralidad del clero. Se vendían los cargos principales, y el placer y la ostentación constituían las formas de vida más comunes. Los excesos y crueldades, en nombre de Dios, estaban a la orden del día.- El surgimiento de grupos organizados antisacerdotales. Ejemplo de ellos son: los husitas, los albigenses, los valdenses, y otros influidos por el pensamiento de hombres como Pedro de Bruys, Enrique el Diácono, etc.- La influencia de los místicos, dotados de una profunda sensibilidad religiosa, como San Bernardo, Buenaventura y Anselmo.- El reclamo de la gente por una experiencia espiritual verdadera. Por aquellos días la vida cristiana, en términos generales, era nula; se confundía con el apego obligado a las ceremonias y actos visibles. Por otro lado, el pensamiento escolástico había restringido el estudio de la Biblia a una clase superior: el clero; dejando a las multitudes sin alimento espiritual.

Políticas

- El nacionalismo de los países europeos. Las sociedades estaban subordinadas a la iglesia y a Roma. Los gobernantes, hartos de la interferencia papal, se fueron independizando de Roma, lo que minó gradualmente la autoridad del clero sobre las naciones. "Al toque de la trompeta de Lutero, Alemania, Inglaterra y Escocia sobresaltaron como gigantes despertados del sueño".- La implementación de políticas secularistas; es decir, se pasaban por alto las políticas e intereses religiosos en las decisiones internas de los países.

Culturales

- El renovado espíritu intelectual. La actividad pensante en la Edad Media estaba limitada a los religiosos y amoldada a los intereses del clero. El humanismo comenzó a despertar las inquietudes intelectuales de muchas personas, especialmente de la juventud.

 
El regreso al estudio de los clásicos y las Sagradas Escrituras.Los reformadores capitalizaron todos estos factores, y aunque fracasaron los intentos de renovar a la iglesia interiormente, su determinación tuvo buen éxito, "y engendró esa gran familia de iglesias protestantes que se encuentran en todas las naciones progresistas del mundo".
 
- Una gran aliada del movimiento reformado: la imprenta. Aunque no fue una causa, propiamente dicha, sí constituyó un poderoso medio de propagación. Fue inventada por Gutenberg en 1455, y sirvió para distribuir en gigantescas proporciones, libros y folletos con ideas reformistas; y de manera especial, sirvió para poner la Biblia al alcance de millones de personas. Es conocido que ella fue la primera y gran obra salida de este maravilloso invento.







ABSOLUTISMO









 













¿COMO Y POR QUE SURGE EL ABSOLUTISMO?
A fines de la Edad Media se combinaron una serie de factores que estimularon la centralización del poder y crearon la necesidad de un poder fuerte.
En primer lugar la lucha entre los nobles y los burgueses y la luchas internas entre los nobles convirtieron a los señores principales en árbitros de la situación. Los nobles principales que querían dominar al resto hicieron alianzas con los comerciantes de las ciudades defendiéndolos de los otros nobles; a cambio los burgueses dieron a ese noble principal (rey) recursos suficientes para pagar soldados (así no necesitaba del apoyo de los nobles) que le permitieran llevar adelante las guerras. Por su parte el rey ennoblecía a la burguesía otorgándoles títulos de nobleza. La unificación del territorio bajo un mismo gobierno y bajo las mismas leyes, beneficiaba a los comerciantes porque agrandaba y unificaba el mercado. Hasta ese momento los territorios de los señores eran regidos por sus propias normas y para pasar de un feudo a otro había que pagar impuestos al igual que para pasar por sus tierras (peajes). Al centralizarse el poder estas trabas al comercio se eliminaban y los comerciantes podían llevar sus mercaderías de una ciudad a otra. La ampliación del número de consumidores aumentó la producción y sus ganancias. Los gobiernos monárquicos protegieron la producción de su territorio de la competencia que les podían hacer los productores de otros países mediante impuestos aduaneros (mercantilismo).
Otro factor que impulsó al absolutismo fue la necesidad de un poder fuerte ante la inseguridad creada por las guerras, las rebeliones y las epidemias. Las supersticiones, los temores irracionales, alimentados por el fanatismo religioso, propiciaron el miedo y la búsqueda del orden y la seguridad aunque se impusieran a la fuerza. Los reyes encarnaban ese orden.
El Renacimiento no sólo fue la época del renacer del arte romano, también renació el Derecho Romano y la organización política que aquel consagró: un príncipe absoluto con todos los poderes (imperator) cuya voluntad se hacía ley. A fines de la Edad Media los juristas (los especialistas en derecho), rescataron el Derecho romano escrito que luego de la caída del Imperio Romano había perdido jerarquía frente al derecho consuetudinario (no escrito, basado en las costumbres) de los invasores germanos. En Francia, por ejemplo, estos juristas dieron legitimidad al poder del rey Felipe el Hermoso, lo que le permitió a este desprenderse de la Iglesia que era, hasta ese momento la que legitimaba el poder de los monarcas.
 
LAS TEORÍAS ABSOLUTISTAS
En Francia desde Enrique IV, en España a partir de los Reyes Católicos y en Inglaterra con la dinastía Tudor, la autoridad del rey se fue afirmando. El ejército permanente, el cobro de impuestos y la multiplicación de funcionarios daba forma a un gobierno y una administración que se imponen sobre los nobles y las ciudades. Algunos intelectuales contemporáneos al absolutismo trataron de explicarlo y justificarlo. En algunos casos se trataba de darle una explicación racional al aumento de la autoridad estatal; en otros era una propaganda para justificar ante la población el uso y abuso de poder que ejercían los monarcas.
 
Nicolás Maquiavelo(1469-1527), escritor y diplomático florentino, se dice que su obra más conocida, “El Príncipe”, se inspiró en el gobierno de César Borgia, justificando su astucia, su picardía y su falta de escrúpulos para gobernar. Maquiavelo creía que había dos tipos de gobiernos: aquellos en que la autoridad está sometida a las leyes (repúblicas), y aquellos en que la autoridad está por encima de la ley (principados). Si bien considera que en teoría, la primera sería la mejor forma de gobernar, en la realidad un gobierno es efectivo cuando se opta por la segunda modalidad. Este pensamiento de Maquiavelo se debe en gran parte a la situación de división en que se encontraba Italia en ese momento y al recuerdo del glorioso pasado del Imperio Romano. Maquiavelo consideraba que la única manera en que Italia podía lograr la unidad era mediante un principado o monarquía absoluta. Este autor hace una separación entre lo que es moralmente correcto y lo que es políticamente necesario: no importa si una medida de gobierno es injusta o cruel si es buena para el éxito del gobernante; no importan los medios que se utilicen sino los fines perseguidos, por lo tanto el rey puede usar cualquier medio, la fuerza, el asesinato, etc, pero siempre con la astucia necesaria para que evitar que la población se rebele. Por eso recomendaba a los reyes a actuar con “la fuerza del león y la astucia del zorro”.
Para Maquiavelo los hombres eran egoístas, buscaban sólo el provecho personal y esto provocaba la corrupción social. “Los hombres cometen siempre el error de no saber poner límites a sus esperanzas”, decía. Consideraba que un gobernante prudente debía basar su política en ese aspecto de la naturaleza humana y asegurar la propiedad, porque, según sus palabras, el gobernante prudente puede matar pero no saquear, ya que un hombre olvida más fácilmente el asesinato de su padre que la confiscación de sus bienes.
Thomas Hobbes (1588-1679), nacido en Inglaterra, es un importante teórico del absolutismo que se caracteriza por ver la política como un conocimiento separado de la religión y de la moral. Sus ideas acerca del absolutismo las difundió en un libro llamado “Leviathan”. En este sostiene que los hombres originalmente vivían en un estado natural, sin gobierno ni leyes, donde luchaban por defender sus intereses y el más fuerte se imponía. Dice Hobbes que en esa situación la vida era “solitaria, pobre, impura, brutal y breve”. Para salir de esa vida salvaje, los hombres hicieron un acuerdo, un contrato, formando la sociedad civil y creando un soberano o gobierno al que se sometieron a cambio de obtener seguridad. El gobierno no había sido parte de el contrato, había surgido de él, y se había independizado de sus creadores. Por lo tanto, sostenía que el gobierno absoluto fue creado por el pueblo pero para someterse a él y los individuos no podía quejarse si el gobernante era tiránico porque no había ninguna ley natural ni divina que limitara el poder del gobernante.
Además, como afirmaba que el poder absoluto venía del contrato firmado por los hombres para lograr la seguridad y poner fin al estado natural, Hobbes sostenía que el poder del rey no es de origen divino y la Iglesia debía estar sometida a las autoridades del país.
Las ideas de Hobbes se vieron influenciadas por los conflictos políticos de su época; afectado por las guerras civiles que soportaba Inglaterra, fue partidario de la paz y el bienestar a cualquier precio, por eso vio en el absolutismo una forma de gobierno útil para el desenvolvimiento de los individuos.
Bossuet (1627-1704) nacido en Francia, fue Obispo de Meaux y consejero del rey Luis XIV. En su libro “La política sacada de las Santas Escrituras” expresa que la monarquía se rige por cuatro características: 1) es sagrada; 2) es absoluta; 3) debe ejercerse paternalmente; 4) debe ejercerse de acuerdo a la razón.
Sagrada significa que el gobierno viene de Dios, tiene origen divino. Dios creó el poder político y es su voluntad la que decide quienes son los gobernantes.
Absoluta o ilimitada porque al poder que ha creado Dios mismo, ningún hombre puede ponerle limites. Los reyes, que gobiernan por la voluntad de Dios, sólo son responsables de sus actos ante él, no tienen que rendir cuentas de sus actos ante ningún ser humano; nadie puede juzgar al rey.
El rey está sometido a normas naturales, creadas por Dios, sino sería arbitrario. Esas normas, que están por encima de la voluntad humana, obligan al rey a gobernar para la felicidad de sus pueblos y no para satisfacer sus caprichos personales. Por eso dice Bossuet que el monarca debe actuar como un padre con sus hijos, guiarlos, protegerlos y corregirlos y castigarlos si es necesario.
Finalmente, la autoridad del gobernante debe ejercerse conforme a la razón; el rey debe ejercer el gobierno conociendo lo que hace, al decir de Bossuet debe “estudiar las cosas útiles, saber la ley, conocer los negocios, conocerse a si mismo, hablar y callarse oportunamente, prever, instruir a sus ministros”.


EL ABSOLUTISMO

 
El absolutismo es la forma de gobierno que encontramos en Europa Occidental durante los siglos XVI, XVII y XVIII Está basada en la centralización del poder en el rey o monarca. En la época anterior el rey tenía el poder compartido con los señores feudales ya que estos tenían sus propios ejércitos, administraban justicia, hacían leyes y cobraban sus propios impuestos. A partir del siglo XV surge en Europa el estado moderno que contará con:
1) Una autoridad central común para todo el territorio.
2) Una burocracia especializada.
3) Un ejército permanente.
4) Reconocimiento de ese estado por parte de otros.
Salvo excepciones estos estados tomarán como forma de gobierno la  monarquía, que tendrá dos etapas: 1) la MONARQUÍA AUTORITARIA, durante el siglo XVI, donde el rey aún tiene algunos límites a su poder (por ejemplo los derechos o fueros de las ciudades y las regiones; 2) la etapa ABSOLUTISTA, entre los siglos XVII y XVIII, donde el monarca impone su voluntad sin rendir cuentas a nadie.
Se le otorga un poder ilimitado al jefe del gobierno, el rey, quien se ubica por encima de las leyes y por lo tanto no hay casi límites legales a su autoridad

EL MERCANTILISMO
LA ECONOMÍA DE LA ÉPOCA ABSOLUTISTA: EL MERCANTILISMO
En la época feudal la actividad comercial estaba limitada: cada feudo producía lo que consumía y casi no había intercambio de productos de una región a otra. Además las reglamentaciones de los gremios artesanales evitaban la competencia y se trabajaba sólo para obtener una moderada ganancia (“el precio justo”). A partir del siglo XII se pasa a una economía más abierta: se intercambian más productos y esto provoca un aumento de circulación de la moneda y la aparición de mecanismos que permitían pagar a distancia sin necesidad de llevar las monedas de un lugar a otro: letras de cambio, depósitos, cuentas corrientes, etc). Así surgieron los primeros bancos, vinculados a las regiones europeas donde más movimiento comercial había: norte de Italia y centro de Europa. Prestar dinero a cambio del cobro de un interés era considerado un pecado por la iglesia católica, pero a medida que se hizo necesario invertir más, para ganar más, los préstamos se desarrollaron. De esa forma el dinero comenzó a producir dinero y surgió el capitalismo.
En el siglo XVI ya es evidente la nueva mentalidad económica que imponen los comerciantes y banqueros: afán de lucro, gusto por el riesgo, organización. Los negocios se “racionalizan”, se perfeccionan las técnicas de contabilidad, se desarrollan los seguros y se crean sociedades comerciales.
Con la creación de los estados nacionales (Francia, Inglaterra, España, etc) aparece una economía nacional que termina de sustituir a las economía regionales feudales. Las regiones, municipios, feudos, etc, son integrados y forman un “mercado nacional”, donde las burguesías de cada país podrán vender sus productos. La moneda se convierte en instrumento de cambio fundamental, por ello se intensifica la búsqueda de metales preciosos con los cuáles se acuña. El dinero pasó a ser cada vez más importante desplazando de a poco a la tierra como base del poder económico.
El descubrimiento de América y el traslado del oro y la plata americanos hacia Europa, aumentaron la circulación de metales preciosos y provocaron un aumento considerable de los precios que se cuadruplicaron en el transcurso del siglo XVI.
El intento de racionalizar, explicar y dominar los cambios económicos llevó a estudiar esos cambios y a tomar medidas por parte de los monarcas.


El mercantilismo es el conjunto de principios teóricos y prácticas que dominaron el pensamiento económico de Europa entre los siglos XVI y XVIII. Las primeras medidas mercantilistas parecen ser tomadas por Portugal en la época en que conquistaba territorios en las Indias Orientales y establecía un sistema cerrado de comercio: sus posesiones sólo podían comerciar con él. A Portugal lo siguió España y más tarde Francia, Inglaterra y Holanda. El modelo teórico de mercantilismo responde a los siguientes principios:
1) Metalismo. El punto de partida consiste en creer que la riqueza de los países está constituida por la cantidad de oro y plata que poseen, por lo que el país más rico era el que acumulaba más metales preciosos. Este pensamiento, en parte, fue el resultado de la gran cantidad de metal que entró en Europa procedente de América. El oro y la plata eran utilizados como medio de pago, o sea como moneda, por lo tanto la mayor cantidad de metal permitía una mayor acuñación y circulación de moneda, aumentando la actividad comercial. Los países obtenían el metal precioso de las minas que tenían en su territorio y sino debían recurrir a la colonización de otros territorios u obtener el metal mediante un aumento de las exportaciones, ya que los productos se pagaban con oro o plata.
2) Balanza comercial favorable. Esta se obtenía con exportaciones superiores a las importaciones; los países debían vender mucho y comprar poco, las ventas al exterior significaban más ingresos en metal, las compras provocaban una perdida de metal porque se pagaba con él. Para lograr esto se requería tener productos para exportar en los que haya interés de compra desde el exterior y que se limitaran las importaciones.
3) Aumento de la producción. Esto era necesario por dos razones: tener suficientes productos para el consumo de la población del país y evitar así comprarlos en el exterior (disminuían las importaciones) y tener productos para exportar a otros estados. Para aumentar la producción,fuera agrícola o industrial, era necesario crear estímulos, incentivar la producción, por ejemplo mediante rebajas de impuestos a los inversores que creaban manufacturas. También era necesario defender la producción nacional de la competencia que podían hacer los productos de otro país y para eso se aumentaban los impuestos aduaneros (aranceles). Esta última medida también era necesaria para disminuir las importaciones ya que al aumentar el impuesto a los productos importados, estos aumentaban de precio y ya no era ventajoso comprarlos. Los aranceles aumentaban para los productos extranjeros elaborados, pero las materias primas se trataba de que ingresaran lo más baratas posible para que fueran elaboradas por las industrias nacionales.
4) Dirigismo estatal. El establecimiento de aranceles altos, los estímulos a la producción nacional y otras medidas para mantener la balanza comercial favorable, requerían de la intervención del estado en la economía. El mercantilismo no era contrario a la iniciativa privada, pero era necesaria la intervención del estado establecer las medidas que permitieran obtener y conservar el metal precioso.
5) Poblacionismo. El aumento de población era considerado factor fundamental para el crecimiento económico del país. Al haber más población, había más mano de obra y se abarataba su costo. Los mercantilistas recomendaban tener población abundante y pobre, que permitiera mantener bajos los salarios, de ésta manera se bajaban los costos de producción y los productos se hacían más baratos y podían competir mejor con los extranjeros.

UN MODELO DE ABSOLUTISMO: LUIS XIV

 
ANTECEDENTES
El estado nacional francés surgió en la Edad Media con un pequeño territorio rodeado de poderosos y belicosos señores feudales. Los primeros reyes del estado francés moderno, la dinastía de los Capetos, aumentaron el tamaño de su territorio en frecuentes guerras con los señores vecinos, especialmente con los Plantagenet que eran reyes de Inglaterra.
 La dinastía que siguió a los Capetos, los Valois, aumentaron la centralización del poder y consolidaron el dominio del territorio. En el siglo XVI el rey de Francia tenía un ejército permanente, imponía tributos sin pedir consentimiento, variaba las leyes a voluntad, dictaba ordenanzas o edictos. El Rey era ayudado en su tarea por el Real Consejo y para hacerse obedecer en las provincias enviaba un gobernador que debía alistar el ejército y mantener en buen estado las fortalezas
Francisco I .- Francisco I es un buen ejemplo de monarca francés de la época renacentista. Quitó poder a los tribunales de la Iglesia y la mayoría de los pleitos pasaron a tribunales civiles. Como gastaba mucho dinero en guerras, fiestas y costosas pensiones, siempre le faltaba dinero. Para aumentar el tesoro real dobló los impuestos sobre los aldeanos y obligó a los habitantes de París a pagar un tributo extraordinario. La urgencia de dinero llevó a Francisco I a designar a gente rica para importantes cargos de gobierno a cambio de le entregaran fuertes sumas de dinero. Luego recobraban el dinero entregado con el cobro de impuestos. Para obtener dinero también se recurrió a la venta de los cargos públicos. Francisco I vendió todos los cargos referidos a la administración de justicia y se crearon cargos inútiles simplemente para venderlos. El que compraba el cargo no podía ser destituido y lo tenía por vida. Fue tal la venta de cargos que en 1522 se creó una oficina encargada de las ventas (Oficina de Partidas Eventuales). Esta forma de obtener dinero se mantuvo en los reinados posteriores.
Otra característica del reinado de Francisco I que se mantuvo luego fue la multitud de personas que le rodeaban y servían, la Corte. Esas personas , a las que se llamaba “el hotel” (la casa) eran en su mayoría nobles que querían estar cerca del rey, hablarle, pedirle favores, etc.
La obra de Francisco I se vio paralizada a su muerte por la mediocridad de los monarcas que ocuparon el trono y por las guerras religiosas entre católicos y protestantes.
Los Borbones.- Con la dinastía de los Borbones la centralización del poder llega a su punto máximo en Francia. Esta dinastía se inicia con Enrique IV (Enrique Borbón o Enrique de Navarra) en 1594, quien puso fin a las guerras religiosas que dividían a católicos y protestantes, eliminó estatutos regionales, sometió a los nobles rebeldes y llegó a un acuerdo de paz con España que le permitiera estabilidad para desarrollar la economía francesa.
Enrique IV encontró a Francia arruinada, el tesoro vacío, las aldeas abandonadas, los campos sin trabajar y muchos soldados que se habían transformado en bandidos que asaltaban a los comerciantes en los caminos. El rey persiguió y ahorcó a los bandidos, volvió a someter a los nobles, ordenó las finanzas, impulsó las manufacturas, especialmente las de seda y tapices y ordenó la creación de caminos para mejorar las comunicaciones internas de Francia.


Enrique IV murió asesinado en 1610 y debía sucederle su hijo (Luis XIII) pero como éste era menor de edad se produce la regencia de su madre María de Medicis. En 1617 asume Luis XIII el gobierno, pero en realidad, entre 1624 y 1642 los destinos de Francia van a ser marcados por el principal consejero del rey: el Cardenal de Richelieu. Este fortaleció el poder del rey adoptando una política fuerte frente a los protestantes y la nobleza. A los protestantes les reconoció la libertad de conciencia y culto, pero les quitó las fortalezas que tenían en su poder. También se demolieron algunos castillos que podían ser usados por los nobles rebeldes. Los nobles que intentaron rebelarse fueron detenidos y ejecutados.
Los Parlamentos (tribunales de justicia en manos de los nobles) fueron controlados al igual que los gobernadores a los que se les envió un intendente para vigilarlos.
En el aspecto económico Richelieu estimuló la creación de grandes compañías comerciales, mejoró los puertos del Atlántico y favoreció la colonización de Canada y las Antillas. También estimuló el desarrollo de industrias de productos de lujo destinados a la exportación.
El Cardenal de Richelieu murió en diciembre de 1642 y cinco meses después murió el rey Luis XIII. Asumió el tronó  Luis XIV que sólo tenía 5 años de edad. Durante la minoría de edad del rey, el Cardenal Mazarino fue el verdadero gobernante. Mazarino, como antes Richelieu, no tenía un cargo de gobierno definido, ni títulos, ni era regente, pero por acumulación de cargos, funciones e influencias actuó como un Primer Ministro.
Al asumir Mazarino tuvo que enfrentar una rebelión del Parlamento (que se encargaba de registrar las decisiones del rey como edictos reales y estos no tenían fuerza legal hasta que se cumpliera con ese registro) que se denominó La Fronda. Por este movimiento de rebeldía el parlamento francés quiso limitar la monarquía atendiendo los intereses de la nobleza (los integrantes del Parlamento francés eran nobles que habían comprado lo cargos). Los rebeldes fueron derrotados y se fortaleció el poder de la monarquía.
 
EL REY SOL
A la muerte de Mazarino, en 1661, Luis XIV comienza su gobierno personal que duró 54 años (hasta su muerte en 1715). No quiso dejar la función de gobernar en manos de otra persona, y ejerció el poder directamente, convocando personalmente a los ministros, interviniendo en todos los asuntos que consideraba importantes y controlando, a través de los intendentes, todo el territorio francés.
Luis XIV estaba plenamente convencido del origen divino de su poder, algo que todas reconocían sin atreverse a negarlo. Desde la infancia se le había repetido que el era casi un dios, una “divinidad visible”, un hombre diferente a los demás, porque era Rey “por gracia de Dios” y sólo ante este debía rendir cuentas. Ningún hombre podía juzgar al rey y nada era ajeno a éste. Luis XIV tomó como emblema de su reinado un sol resplandeciente y de ahí el apodo con que se le conoce “el Rey Sol”. Y así como todos los planetas del sistema solar giran en torno al sol, de la misma manera todo los sucedido en Francia debía girar en torno al rey.
Luis XIV tenía condiciones que lo hacían apto para desempeñar su papel en un momento en que la sociedad estaba preparada para el absolutismo monárquico: era fuerte, equilibrado, trabajador incansable, reflexivo, dueño de si mismo y consciente de su responsabilidad de gobernante, lo que el llamaba “el oficio de ser rey”.  Para él, gobernar era un oficio o trabajo como cualquier otro y requería una dedicación diaria de muchas horas.
Durante su reinado se hizo más evidente el culto a la majestad real y cada uno de los actos cotidianos de su vida, como levantarse, asearse, comer, etc, se convirtió en una ceremonia. La nobleza, sometida y domesticada, no desempeñaba funciones políticas. Se la empleaba en el ejército o en la diplomacia, pero sobre todo cumplía una función “decorativa” dentro de la Corte. Esta, que desde 1682 se instaló en el elegante Palacio de Versalles, se caracterizaba por un minucioso ceremonial que se regía por una estricta etiqueta. Se realizaba un culto a la figura del rey y los nobles seguían sus pasos, actividades, entretenimientos desde la mañana hasta la noche. Los nobles, antes rebeldes y belicosos, se disputaban el privilegio de estar cerca del rey y servirle en las tareas más simples como despertarle o ponerle las pantuflas al descender de la cama. Todas las actividades cotidianas de la familia real se transformaron en una ceremonia
 
ORGANIZACIÓN POLÍTICA
Como principio fundamental figuró el de la monarquía absoluta de derecho divino: se consideraba que la autoridad del monarca procedía de dios y que sólo ante él, y no ante los hombres, era responsable. Todo el poder de decisión estaba en manos del rey, pero existían consejos con fines de asesoramiento, como el Consejo de Estado y el Consejo de Justicia.
Al frente de la administración había ministros o secretarios como el Canciller, el Controlador General de Finanzas, el Secretario de Guerra, el Secretario de Asuntos Exteriores, etc. Muchos ministros acumularon funciones como, por ejemplo, Colbert, que se ocupó de las finanzas, de la marina, las construcciones navales y los trabajos públicos.
Se aumentó el poder de los intendentes para controlar mejor a los gobernadores de las provincias que pasaron a tener un papel decorativo. Los Parlamentos fueron sometidos.
En materia judicial el rey podía administrar justicia a su antojo a través de las “lettres de cachet” (cartas selladas) con las cuales notificaba una resolución a cualquier súbdito. Podía así, decretar la prisión, la proscripción, etc sin ningún trámite judicial.
También quitó poder y autonomía a las universidades, que pasaron a ser controladas por la monarquía. El arte fue utilizado para propaganda del reinado.
Como el rey no aceptaba que ninguna autoridad rivalizara con su poder dentro de Francia, sometió al clero católico francés y obligó a que una asamblea del clero declarara que el rey era independiente con respecto a todo poder de la Iglesia, incluyendo al Papa. Por otro lado realizó una campaña de persecución contra los protestantes, que fueron excluidos de las funciones públicas y de las profesiones liberales. Finalmente se les prohibió practicar su culto, provocando la huida de unos 200.000 protestantes. Como en gran parte se trataba de banqueros, comerciantes, manufactureros o artesanos especializados, la economía francesa se vio perjudicada por esta medida.
 
ORGANIZACIÓN ECONÓMICA
La economía de Francia, bajo el reinado de Luis XIV, fue dirigida por Juan Bautista Colbert durante 22 años. Colbert se rigió por los principios del mercantilismo : procuró intensificar la producción y las exportaciones para lograr una balanza comercial favorable y propulsó la intervención del estado en la vida económica.
Colbert estimuló el desarrollo de las manufacturas, algunas privadas y otras a cargo del estado, dedicadas especialmente a productos de lujo como sedas, tapices, perfumes, porcelanas, espejos, lozas. Los fabricantes estaban sometidos a severas reglas y a inspecciones para asegurar la calidad de los productos. Mediante altos aranceles (impuestos aduaneros) se protegía la producción francesa de la competencia extranjera favoreciendo su desarrollo.


El comercio interior aumentó gracias al mejoramiento de las vías de comunicación, pero fue el comercio exterior el que mereció la máxima atención de Colbert. Se fundaron grandes compañías de comercio a las que el gobierno otorgó privilegios o monopolios para el comercio con las colonias. Se apoyó la instalación de astilleros para la construcción de barcos, con lo cual creció la marina mercante. Se fomentó la colonización, especialmente en América del Norte (conquista de Luisiana).
También se mejoró la recaudación de impuestos haciendo más simple y racional el sistema y procurando una contabilidad correcta, con claridad en cuanto a los ingresos y gastos. Pero, a pesar de los esfuerzos de Colbert, los gastos provocados por la Corte y las constantes guerras, desequilibraban las finanzas y se debía recurrir a impuestos extraordinarios.
Luego de la muerte de Colbert, ocurrida en 1685, comenzó la decadencia de la economía francesa. Un descenso general del precio de lo productos exportados, los despilfarros de la Corte y los gastos de guerra, y la huida de los protestantes, provocaron devaluaciones, endeudamiento externo y aumento de impuestos. Fue una pesada carga para los sucesores de Luis XIV.
 
LA POLÍTICA EXTERIOR DE LUIS XIV
Luis XIV llevó a cabo una política exterior agresiva que mantuvo a Francia en continuas guerras durante la mayor parte de su reinado.  Pretendió que Francia alcanzara sus “fronteras naturales”, o sea todos aquellos territorios que antiguamente habían pertenecido a las Galias; esto significaba la anexión de los Países Bajos, el Franco Condado, Lorena y Saboya. Los dos primeros pertenecían al rey de España Felipe IV y pensaba obtenerlos por medio de su esposa, María Teresa, que era hija de aquel. En cuanto a Lorena y Saboya, si bien no descartaba el uso de la fuerza para anexarlas, pensaba adquirirlas a cambio de algunos otros territorios que recibiera de la “herencia española”.
Para lograr sus objetivos el Rey Sol contaba con una buena diplomacia que utilizaba la astucia y el soborno para conseguir el favor de funcionarios de otros estados. Cuando la diplomacia no alcanzaba se recurrió a la guerra, donde el rey contaba con excelentes colaboradores como el Ministro Luvois y los generales Condé, Turena y Catinat.
Durante el reinado de Luis XIV, Francia participó en cuatro grandes guerras:
La guerra de devolución (1667-1668). Al morir el rey de España, Felipe IV, dejó sus territorios a un hijo tenido en su segundo matrimonio y que fue coronado como Carlos II. Luis XIV, decepcionado por que entendía que, por lo menos algunos territorios, debían corresponderle a su esposa María Teresa que era hija primogénita, invadió Flandes (parte de los Países Bajos, actual Bélgica) y el Franco Condado. Inglaterra, Holanda y Suecia apoyaron a España y amenazaron con declarar la guerra a Francia si esta no cesaba la invasión. Entonces Luis XIV aceptó hacer un acuerdo, la paz de Aquisgrán, se retiró del Franco Condado, pero mantuvo la ocupación de parte de Flandes. La paz en realidad era una tregua momentánea.
La guerra de Holanda (1672-1678). Con esta guerra además de obtener territorios el rey de Francia intentó contrarrestar el poderío comercial de los holandeses (parte norte de los Países Bajos). Antes del uso de las armas se desarrolló una “guerra de aranceles” entre ambos países. Finalmente Luis XIV consiguió la neutralidad de Inglaterra y de Alemania e invadió a Holanda. La resistencia ofrecida por los holandeses dio tiempo a España y Alemania de intervenir en favor de aquellos. Suecia intervino a favor de Francia, y Prusia y Dinamarca, enemigos de Suecia, apoyaron a Holanda, llevando el conflicto a buena parte de Europa. La lucha terminó con la paz de Nimega y quien pagó los platos rotos fue España que debió entregar el Franco Condado a Francia. La paz de Nimega marca el momento de apogeo de Luis XIV y la ciudad de París le dio el nombre de “Luis el Grande”.
La guerra de la Liga de Augsburgo (1688-1697). Varios estados europeos promovieron una alianza para oponerse a la expansión francesa. Así fue que Inglaterra, Alemania, Holanda, España y Saboya unieron sus fuerzas contra el Rey Sol. Francia pudo resistir el ataque de los aliados a pesar de sus derrotas en el mar y luego de nueve años de lucha se llegó al tratado de Riswick, en el que Francia debió abandonar alguno de los territorios anteriormente conquistados.
La guerra de sucesión de España (1702-1714). El rey de España Carlos II no tenía buena salud física, ni mental, y no tenía hijos que lo sucedieran. Pero le sobraban territorios y tenía codiciosos parientes que esperaban su muerte para proceder al reparto de la sucesión territorial. Entre estos parientes se encontraban sus cuñados Luis XIV y Leopoldo I emperador de Alemania. Antes de morir Carlos II designó como sucesor a Felipe de Borbón, nieto de Luis XIV; los demás monarcas europeos se estremecieron al pensar en la posibilidad de una formidable alianza entre Francia y España. Fueron a la guerra para impedir el ascenso al trono de Felipe. En esta guerra se observa la declinación del poderío francés, pero igual Luis XIV pudo obtener una paz no totalmente desfavorable aprovechando la discrepancias que había entre sus adversarios. Esas discrepancias llevaron a que hubiera dos acuerdos de Paz: el de Utrecht y el de Rastadt. Francia perdió algunos territorios en sus fronteras y en América del Norte. El nieto de Luis XIV se pudo mantener como rey de España, Felipe V, pero renunció a sus derechos a la sucesión del reino de Francia y España, uno de los más perjudicados en los acuerdos de paz, cedió a Inglaterra Gibraltar y Menorca y a Austria territorios en Italia y los Países Bajos. El gran triunfador fue Inglaterra que obtuvo territorios en América del Norte, islas en el Mar Caribe, Menorca y Gibraltar (que le permitían un mejor control del Mediterráneo) y privilegios comerciales concedidos por España en sus colonias americanas (tráfico de esclavos y el beneficio de enviar anualmente buques de comercio cargados de mercaderías inglesas). Holanda sufrió grandes pérdidas navales y comenzó su decadencia.
La política exterior de Luis XIV colocó, durante algún tiempo, a Francia en el primer plano de Europa y a si mismo como árbitro de los conflictos internacionales. Sin embargo, a largo plazo, los objetivos no fueron alcanzados y al final de su reinado dejó a Francia en una situación difícil que sus sucesores (Luis XV y Luis XVI) no supieron cambiar. En lo externo, a la muerte de Luis XIV, era evidente que una nueva potencia se imponía: la Inglaterra que comenzaba a reinar



















FIN DEL ABSOLUTISMO EN INGLATERRA
La dinastía de los Tudor, que gobernó Inglaterra en el siglo XVI (1485-1603), practicó
 elabsolutismo, ya que mantuvieron la estructura política existente,  controlaron al Parlamento, dominaron a la Iglesia e intervinieron en la vida económica.
Inglaterra tenía, desde 1215, un documento llamado Carta Magna, la que el rey Juan I de Inglaterra (Juan sin Tierra) debió aceptar para solucionar los problemas sociales y política de su país. Tenía unos 63 artículos que aseguraban los derechos feudales a la aristocracia frente al poder del Rey, ya que ninguna persona podría ser enjuiciada sólo por la voluntad del rey, y la monarquía se comprometía a respetar las libertades religiosas y políticas. En tanto un Parlamento, integrado por nobles y comunes (alta burguesía) se encargaba de aprobar los impuestos y de aconsejar al rey.
 
DINASTÍA ESTUARDO (STUART O STEWART)

Cuando en 1603 muere la reina Isabel I, última representante de la dinastía de los Tudor, asciende al trono Jacobo I Estuardo, sobrino de Isabel I ya que ésta no tuvo hijos. Como Jacobo ya era rey de Escocia, quedaba Inglaterra unida a Escocia, pero con instituciones y leyes particulares. El nuevo rey dejó en claro que sus poderes eran ilimitados por "derecho divino", por lo tanto concedidos por Dios. Además, el rey profesaba la religión anglicana, lo que lo hacía chocar con el Parlamento donde la mayoría eran puritanos, es decir, aquellos que querían reformar la Iglesia Anglicana para "purificarla" de todos los elementos católicos que aún contenía.
 
Carlos I, hijo de Jacobo I, se convierte en rey, pero fue siempre impopular, además era casado con Enriqueta, una francesa católica, hermana de Luis XIII. Este rey, como su padre, tampoco tuvo buenas relaciones con el Parlamento, ya que este le hizo fuerte oposición, por lo que en 1628, le obligó a reconocer la Petición de Derechos a cambio de aprobar solicitudes financieras. En dicha Petición, se establecía principios tan importantes como que nadie podía ser arrestado sino de acuerdo con la ley, y que sería ilegal todo impuesto que no fuera aprobado por el Parlamento.
El rey Carlos I enojado por estas medidas, decidió no pedir más la colaboración del Parlamento para gobernar, tal cual un rey absoluto.
Una de las medidas que el rey tomó, fue la de volver a cobrar un viejo impuesto llamado ship money, en la que se cobraba dinero para a construcción de barcos. Aquí se hizo famoso John Hampden, quien se negó a pagar el impuesto, por lo que fue llevado a prisión, convirtiéndose en un héroe para el pueblo.
Pero la situación de Carlos I empeoraba, ya que estaba la amenaza de una sublevación en Escocia, por lo que necesitaba mucho dinero, por lo que no tuvo más remedio que convocar al parlamento, conocido como Parlamento Largo, ya que duró casi quince años.
Dicho parlamento comenzó a juzgar a colaboradores del rey, y  a condenarlos a muerte; también suprimió a los tribunales de justicia elegidos por el rey; prohibió recaudar el ship money, y obligaba al rey a convocar al Parlamento por lo menos una vez cada tres años.
Carlos I se presenta en el Parlamento para detener a sus miembros, pero estos ya no estaban.
 
LA GUERRA CIVIL
"Una representación de la ejecución 
de Carlos I por un testigo ocular"
 de John Weesop. 1649
En 1642 las fuerzas del rey Carlos I y las del Parlamento se enfrentaron. La guerra sería ganada por las fuerzas del parlamento gracias a Oliverio Cromwell, un campesino rico, quien formó una poderosa caballería, los "hombres justos y temerosos de Dios",  todos fanáticos puritanos. Se los conocía como los "flancos de hierro".
Tras cuatro años de lucha, el rey Carlos I se rinde. Fue llevado a juicio y condenado a muerte por "tirano, traidor, asesino y enemigo público de la felicidad del pueblo".
 
LA REPÚBLICA Y LA DICATADURA DE CROMWELL
Oliver Cromwell
El Parlamento abolió la Cámara de los Lores y la dignidad real, por lo que ahora gobernaría en Inglaterra un Consejo de Estado formado por parlamentarios y oficiales del ejército, cuyodirigente fue Cromwell. Así nace la República, denominadaCommonwealth (patrimonio común), que no fue por voto popular, sino que fue impuesta por una minoría. Cromwell aseguró el orden, y venció sublevaciones en Escocia e Irlanda, y en especial desarrolló el comercio gracias con un Acta de Navegación: este documento establecía que las mercaderías importadas a Inglaterra debían ser llevadas en un barco inglés, así se convirtió en una potencia marítima, sacándole el puesto a Holanda.
Un documento llamado Instrumento de Gobierno le dio a Cromwell el cargo vitalicio de Lord Protectorconvirtíéndose así en un dictador, gobernando sin oposición y centralizando todo el poder.
Duró cinco años en su cargo, ampliando su poderío en el exterior, pero dentro del país había resistencia por la falta de libertades.
Al morir Oliver Cromwell, hereda su hijo Ricardo, quien no tenía condiciones para gobernar, por lo que renunció a su cargo en 1660.
El gobierno quedó en manos del ejército, pero el general escocés Monk, marchó sobre Londres y reunió a los sobrevivientes del Parlamento Largo, y les ordenó que hubieran elecciones.
Ese nuevo Parlamento llamó al hijo del asesinado Carlos I para que ocupara el trono, así se restauró a los Estuardos.
 
Carlos II tuvo conflictos con el Parlamento, el que en 1673 aprobó la Bill of Test (ley de prueba) la que exigía ser anglicano para ocupar cargos públicos, quedando así los católicos seguidores del rey fuera del gobierno.
En 1679, el Parlamento también votó una de las leyes más importantes de la historia de Inglaterra, la Habeas corpus (tener el cuerpo) por la que un juez debía examinar si la detención de una persona era justa, así nadie podía ser apresado por más de tres días sin ser sometido a juicio. Es una garantía fundamental para la libertad individual, impidiendo detenciones por el capricho del rey o de otro funcionario. Hoy continúa siendo parte de la legislación universal.
Es en esta época que aparecen los partidos rivales, los whigs, quienes pretendían disminuir lo más posible el poder del rey en beneficio del Parlamento y que con el tiempo se conocerían como liberales. Mientras que los tory (tories) eran conservadores y partidarios de la monarquía absoluta.
 
LA REVOLUCIÓN GLORIOSA
En 1685 sube al trono Jacobo II, hermano del rey anterior, conocido por ser ferviente católico, y pondrá a muchos de ellos en cargos de gobierno. Los  ingleses toleraron esto porque el rey ya era anciano (60 años) y lo sucedería su hija María, protestante y casada con Guillermo de Orange de Holanda.
Pero en 1688, la segunda esposa del rey Jacobo dio a luz a un varón, por lo que habría un rey católico en Inglaterra.
Entonces los tories y los whigs se pusieron de acuerdo y llamaron a Guillermo de Orange para que expulsase a los Estuardos de Inglaterra, y así lo hizo. Jacobo II huyó con su familia a Francia y vivó el resto de su vida como huésped de Luis XIV.
Bill of Rights
Frente a esto, el Parlamento declaró vacante el trono, y convocó a gobernar a Guillermo y María, pero ellos debieron firmar la Declaración de Derechos (Bill of Rights) de 1689, allí se establece que los reyes deben ser anglicanos. Los reyes no podían suspenderse ni aplicarlas sin el consentimiento del Parlamento. No se podían cobrar impuestos ni organizar el ejército sin aprobación parlamentaria. Los impuestos solo valían por un año, obligando a los reyes a convocar al Parlamento por lo menos una vez al año, y los miembros que lo integraran serían elegidos libremente.
También en 1989 se firmó el Acta de Tolerancia que afirmaba a la religión anglicana como oficial pero concedía libertad de culto a las distintas iglesias protestantes, pero no así a los católicos o los cuáqueros.
 
De esta manera, con la Revolución que llamaron Gloriosa, por no derramar ni una gota de sangre, Inglaterra deja de tener una monarquía absoluta para tener una monarquía limitada y evolucionar hasta ser una monarquía parlamentaria, como lo es en la actualidad.

El gobierno se dividió en tres poderes separados entre si. El Poder Ejecutivo compuesto por  le rey y su gabinete; el Poder Legislativo representado por el Parlamento, que estaba formado por la Cámara de los Lores integrada por nobles y obispos anglicanos y la Cámara de los Comunes cuyos miembros eran elegidos por sufragio censitario, es decir los que podían demostrar tener determinados ingresos; y un Poder Judicial.


LAS NUEVAS IDEAS DEL SIGLO XVIII: LA ILUSTRACIÓN





El movimiento ideológico que dio al siglo XVIII el nombre de “siglo de las luces” o “siglo filosófico”, es conocido como Ilustración o Nuevas Ideas. Tiene sus antecedentes en el cambio de ideas que arranca al finalizar la Edad Media, con el Humanismo renacentista y la Reforma Protestante y se continúan con la revolución científica del siglo XVII. El centro de difusión de la Ilustración está en Europa Occidental, especialmente en Francia, seguida de Inglaterra, Alemania y Holanda. Pero tuvo una rápida expansión, pasando por encima de los límites nacionales y de las prohibiciones que sobre su difusión intentaron hacer algunos gobiernos. A través de libros, folletos y periódicos se conoció por toda Europa y llegó a América.
Fue la base ideológica de las Revoluciones Liberales de fines del siglo XVIII y comienzos del XIX (Revolución de las colonias inglesas en América del Norte, Revolución Francesa, Revolución de las colonias españolas de América) y su influencia se prolongó hacia los siglos XIX y XX a través del liberalismo.
CARACTERÍSTICAS DE LA ILUSTRACIÓN
Las características principales de la Ilustración son:
1) La negación de la autoridad y de la tradición como fuente de conocimiento. Se rechazan los prejuicios y las afirmaciones basadas solamente en la autoridad de quien las dice. Esto implicaba desconocer a la religión como fuente para obtener un conocimiento verdadero. Las opiniones del Papa o de los obispos o de los sacerdotes no tienen porque ser verdaderas, por lo tanto la Iglesia puede equivocarse. Los pensadores de la Ilustración están en contra de la superstición, los milagros, la intolerancia y la educación religiosa. Este pensamiento crítico hacia la autoridad religiosa desarrolló el deísmo: se mantenía la creencia en un dios creador del universo pero se rechazaba la iglesia, los dogmas y rituales de las religiones. También se desarrolló, pero en muy pocos casos, el ateísmo, es decir el rechazo a la idea de un dios creador y ordenador del mundo.
2) Desarrollo del espíritu crítico; siguiendo el pensamiento renacentista de Descartes, se pone en duda todo conocimiento y nada se da por cierto si no es demostrable. Consideran que la crítica y la duda permiten avanzar en el conocimiento que el hombre tiene del mundo que le rodea. La posibilidad de expresar dudas y criticar iba acompañada por la lucha por el derecho de expresarse libremente, algo difícil en las monarquías absolutas. A veces los autores disfrazaban sus críticas, sobretodo si eran criticas al régimen de gobierno o a las costumbres, mediante el relato de viajes imaginarios a lugares utópicos (por ejemplo “Los viajes de Gulliver” de Johnattan Swit o “Cándido” de Voltaire)
3) La razón es la guía superior del conocimiento; se rechaza la existencia de ideas innatas. Mediante el razonamiento el hombre puede descubrir las leyes que rigen el universo. Los pensadores del siglo XVIII, desarrollando las ideas de la Revolución Científica del siglo XVII, creen que el universo es como una máquina compuesta de piezas o partes que se ajustan entre ellas y funcionan de acuerdo a ciertas reglas (las leyes naturales). La tarea del investigador, del científico, es la de descubrir esas reglas mediante un método de investigación basado en la observación y la deducción. El pensador David Hume sostenía: “ Echad una mirada en torno al mundo; contemplad el todo y cada una de las partes; veréis que no es otra cosa sino una gran máquina, subdividida en un infinito número de máquinas más pequeñas que a su vez admiten subdivisiones hasta un grado que va más allá de los sentidos del hombre. Todas estas máquinas y hasta sus partes más pequeñas se ajustan entre sí con una precisión que asombra”.

La Ilustración impulsó la investigación científica

4) Confianza en la ciencia y en el progreso. Los intelectuales del siglo XVIII observaron como se producían nuevos descubrimientos, se inventaban maquinas y se aumentaba la cantidad de conocimientos que el hombre tenía. Esto provocó un gran optimismo sobre las posibilidades que el hombre tenía de seguir avanzando en el conocimiento. Pero para ellos este conocimiento tenía que estar basado en reglas precisas y exactas (de la misma manera que el universo se regía por leyes naturales precisas). Esas reglas que había que seguir para obtener un conocimiento verdadero constituían un método científico. Como consecuencia tenemos que: a) sólo mediante el acatamiento a estas reglas se podía llegar a la verdad científica; b) existía una “verdad” fuera del hombre que este podía conocer si aplicaba bien un método de investigación.


5) Búsqueda de la felicidad; en el siglo XVIII existía la firme creencia de que el hombre tiene una tendencia natural a buscar la felicidad y la sociedad y el gobierno deben hacer todo lo posible para que así sea. Creían en un “derecho a la felicidad”. La felicidad se identifica con el placer y especialmente con el goce de lo material. La búsqueda del placer individual no es malo, por el contrario se considera positivo porque el deseo de algo que da placer mueve al hombre a conseguirlo y lo impulsa a trabajar, producir o investigar para conseguir satisfacer ese deseo y obtener placer. El filósofo inglés John Locke afirmaba: “ La inquietud que un hombre siente por la ausencia de una cosa que le daría placer es lo que llamamos deseo y la inquietud es el principal, por no decir el único, aguijón que excita a la creación y a la actividad de los hombres”


La difusión de las ideas de la Ilustración.
Los salones de la aristocracia, los cafés (una novedad del siglo), las sociedades de lectura, las academias científicas y las publicaciones, ya sea de libros o de periódicos, fueron los instrumentos a través de los cuales se difundieron las ideas de la Ilustración.
Las gentes dedicadas a las letras tomaron la costumbre de reunirse para hablar. La costumbre de tomar café acababa de introducirse en Europa y en Francia desde los primeros años del reinado de Luis XV hubo lugares públicos llamados cafés en la ciudad de París. Allí los intelectuales se reunían a charlar y debatir rodeados de la concurrencia; cuando pronunciaban alguna frase que era ingeniosa era recogida por los presentes y difundida por toda la ciudad.
También se hizo costumbre que algunos personajes importantes, generalmente nobles, recibieran a escritores y científicos en su casa, se servía una comida y luego se charlaba durante horas. Los escritores leían sus obras, se discutía sobre literatura, teatro, filosofía y hasta política. Las dueñas de casa se disputaban el honor de tener como invitados a los intelectuales más celebres del momento. 

En los "salones" de algunos nobles se difundieron las Nuevas Ideas


En cuanto a las publicaciones, las nuevas ideas no fueron tan fáciles de difundir públicamente debido a la censura. Algunas críticas se empezaron a deslizar a través de novelas, relatos de viajes imaginarios, obras de teatro, etc. A veces se publicaban en folletines fáciles de ocultar, sin nombre del autor o con un nombre falso. El estado y la iglesia condenaban y quemaban las obras que consideraban “inconvenientes” y sus autores eran perseguidos y encarcelados.
Una de las publicaciones más importantes del siglo XVIII fue la Enciclopedia cuyo verdadero nombre era “Diccionario razonado de las ciencias, las artes y los oficios”. Se trataba de una publicación periódica que abarcó 28 volúmenes entre los años 1751 y 1772. La obra fue dirigida por Diderot y D’Alembert y en ella escribían diversidad de autores (entre otros Voltaire, Rousseau, Condorcet, Turgot) sobre variados temas como lo indica el nombre. Los artículos respondían a distintas corrientes de pensamiento y reflejaban tanto las nuevas ideas como la antigua forma de pensar, evidenciando la tolerancia con que se realizaba la obra.
La Enciclopedia fue el vehículo de expresión ideológica de una fracción importante de la burguesía francesa, la misma que después impulsó la revolución contra el Antiguo Régimen. La obra fue censurada y prohibida durante algún tiempo dentro de Francia. La Iglesia la condenó y la ubicó en su Index de obras prohibidas, mientras que los países más conservadores impidieron su ingreso.
Los autores del siglo XVIII consideraban que la educación era una herramienta importante para la difusión de la nueva forma de pensar y exigían que se incorporara a la enseñanza los descubrimientos de las ciencias así como el uso de la observación y la experimentación. Criticaban la forma de enseñanza tradicional puramente libresca.
Otra forma de difusión de las Nuevas Ideas fue a través de sociedades secretas como la masonería. Muchos de los defensores y difusores de la Ilustración pertenecían a logias masónicas que tenían como uno de sus objetivos desarrollar todas las actividades que mejoraran la condición humana.

LAS NUEVAS IDEAS POLÍTICAS
Los principales aportes de los pensadores de la Ilustración a las ideas políticas fueron sus críticas al absolutismo, la afirmación de que los hombres tienen derechos naturales que nadie les puede quitar (iusnaturalismo), la idea de que el gobierno surge de un acuerdo o contrato entre los hombres y que por lo tanto los gobiernos deben buscar la felicidad de esos hombres (contractualismo), la aceptación de la tolerancia y la libertad de expresión.
Todas estas ideas que hoy en día parecen comunes y aceptadas, eran una novedad para el siglo XVIII. En ese momento la población estaba acostumbrada a obedecer a un monarca y nadie tenía derecho a ofrecerle resistencia. El rey mandaba, elegía funcionarios y dictaba leyes sin importar la opinión de los habitantes del país. No existían ciudadanos sino súbditos. Los súbditos podían ser detenidos y conservados en prisión indefinidamente.
A la iglesia también había que obedecerla sin oposición. El clero decidía lo que los fieles debían creer y las costumbres que debían regir sus vidas. El que se abstenía de seguir la religión era perseguido. La iglesia tenía el apoyo del estado que usaba la fuerza para hacer cumplir lo que aquella ordenaba. Obligaba a asistir a los ritos, a comulgar, etc. El estado y la iglesia tenían una autoridad absoluta y se apoyaban mutuamente: el gobierno obligaba a los súbditos a obedecer los mandatos religiosos y perseguía a los herejes; la iglesia enseñaba a sus seguidores que debían obedecer al gobierno como representante de Dios. No obedecer a la iglesia era delito y no obedecer al rey era pecado.
En Inglaterra fue donde se produjo un cambio en esta situación. En aquel país la iglesia se había dividido en varios grupos que luchaban entre sí para imponerse y el apoyo de los gobiernos a una u otra fue cambiando según quien gobernara. A mediados del siglo XVII se había ejecutado a un rey (Carlos I) y se había establecido una república (revolución de 1648). Luego cuando se volvió a la monarquía otro rey fue destronado por una revolución y el nuevo rey había sido limitado en sus funciones (revolución de 1688). En Inglaterra, y en algunas de sus colonias en América del Norte, se empezó a decir que el poder no pertenece al rey sino al pueblo y que el poder del gobierno no viene de Dios sino de los hombres que han hecho un acuerdo o contrato para crear el gobierno. También se empezó a decir que cada persona puede elegir la religión según su conciencia y que el estado no tiene que ocuparse de asuntos religiosos.




Locke defendió el "derecho a la rebelión" contra los gobiernos tiránicos
John Locke fue uno de los que se encargó de difundir algunas de estas ideas basadas en los hechos que se habían dado en la sociedad inglesa. En 1689 publicó “Tratado sobre el gobierno” donde expresaba: “El estado se basa en el consentimiento voluntario de los hombres que dan a los gobernantes el poder necesario para proteger sus vidas, su libertad, sus intereses y sus propiedades”. Para Locke los hombres habían vivido primitivamente en total libertad, sin reglas ni limites. Luego se reunieron para vivir en sociedad; al hacerlo se pusieron de acuerdo en que mantendrían sus derechos como la libertad y la propiedad. Para que cada hombre respetara el derecho de los demás y, por lo tanto, limitara su propio derecho, crearon el gobierno. Este fue creado entonces para garantizar los derechos de los hombres, si los viola pierde su razón de ser y el contrato entre el gobierno y los hombres se rompe, teniendo estos el derecho de rebelarse. El estado, por tanto, no tiene poder absoluto, su poder está limitado por los derechos de los ciudadanos. Locke no reclama que el gobierno este en manos de todo el pueblo; acepta la existencia de un monarca hereditario pero con su autoridad limitada a través de una asamblea o parlamento.
En 1690 Locke publicó otra obra: “Cartas sobre la tolerancia” en la que sostiene que la iglesia es una sociedad voluntaria de hombres que se reúnen para hacer un culto en común, por lo tanto una iglesia es una asociación privada que no puede imponerse a otros. Por tanto el gobierno no debe imponer ninguna religión, sino tolerarlas a todas, aunque puede tener una religión oficial, como el anglicanismo en Inglaterra.
Estas ideas se difundieron fuera de Inglaterra y llegaron a Francia donde algunos escritores las tomaron y comenzaron a criticar la situación política de este país. Para ellos los ocurrido en Inglaterra era un modelo a imitar. Entre los autores más destacados de este período se encuentran: el Barón de Montesquieu, Voltaire y Juan Jacobo Rousseau.




Montesquieu proponía la división de poderes
EL BARÓN DE MONTESQUIEU (1689-1755)
Para este noble francés los cambios en la sociedad no son obra del azar, sino de causas perfectamente determinadas. Afirma que toda situación social lleva en sí, el germen de la situación siguiente. En su libro “El espíritu de las leyes” expresa que existe una causalidad social que está dada por las leyes que rigen todo lo existente. Las leyes creadas por los hombres deben ser armónicas con las leyes naturales que rigen la sociedad. Sin embargo no cree que exista un total determinismo y considera que las leyes humanas deben variar de un país a otro y adecuarse a las condiciones físicas, a las costumbres, religión, etc. En definitiva es el hombre el que debe legislar usando su razón para lograr las mejores normas.
Según Montesquieu hay tres tipos de gobierno:
a) el gobierno republicano que es aquel en el que todo el pueblo o una parte de él tiene el poder. Puede ser una república democrática si todos tienen el poder y para Montesquieu sólo puede darse en ciudades pequeñas donde todos los vecinos pueden reunirse en la plaza para decidir que hacer. O puede ser una república aristocrática cuando sólo algunos gobiernan.
b) el gobierno monárquico donde gobierna uno sólo pero de acuerdo a leyes fundamentales que debe respetar.
c) el gobierno despótico, donde uno sólo gobierna pero de acuerdo a su capricho, sin leyes ni reglas, y donde el que gobierna es obedecido por el temor que infunde.
Para Montesquieu la mejor forma de gobierno, para su época, es la monárquica. Toma como modelo al gobierno inglés y sostiene que los poderes ejecutivo, legislativo y judicial deben estar separados y en equilibrio.


VOLTAIRE (1694-1778)
No fue un teórico y su obra es contradictoria; fue reconocido y admirado por sus contemporáneos y fue consejero de importantes personajes como la reina Catalina de Rusia y Federico II de Prusia.
 

Voltaire criticó con humor a la sociedad
Voltaire (cuyo verdadero nombre era François Marie Arouet) pertenecía a una rica familia y había recibido desde niño una esmerada educación. Muy joven fue encarcelado por pelear con un noble. Viajó a Inglaterra y a su regresó publicó “Las cartas filosóficas” en las que expresaba su admiración por el sistema de gobierno de aquel país. La autoridad francesa condenó el libro y ordenó quemarlo así como arrestar a su autor.
Pero a pesar de esa admiración temprana por la monarquía limitada creía que una monarquía absoluta podía ser un buen gobierno sí los reyes escuchaban los consejos de los filósofos. Fue un precursor del despotismo ilustrado ya que consideraba que mediante la administración se podían corregir los males de la sociedad. Propone mantener el gobierno tal cual era haciendo algunas reformas como prohibición de detenciones arbitrarias, supresión de la tortura y de la pena de muerte, libertad de pensamiento, supresión de las aduanas interiores para permitir el libre comercio dentro de los países, mejorar el cobro de impuestos.
Fue un severo crítico de las costumbres de su época y especialmente de la Iglesia. Anticlerical y deísta, consideraba que la Iglesia era el sustento de la superstición y el fanatismo. Alababa la libertad religiosa que había en Inglaterra, donde decía “...el hombre libre va al cielo por el camino que le conviene”. Era partidario de una religión natural, es decir de la creencia en dios o la providencia y en la inmortalidad del alma, pero sin ritos, ni dogmas, ni sacerdotes.
No creía en la igualdad social y consideraba beneficioso la jerarquización de la sociedad en clases sociales. Consideraba conveniente no desarrollar la educación de las clases bajas. En un carta a un amigo decía: “ ...Me parece esencial que existan mendigos ignorantes, no es al peón a quien hay que instruir, sino al buen burgués, al habitante de las ciudades. Cuando el populacho se mete a razonar, todo está perdido...” . Nadie mejor que Voltaire expresa los deseos de la alta burguesía de su época.

JUAN JACOBO ROUSSEAU (1712-1778)



Rousseau desconfiaba de los gobiernos
La vida y las ideas de Rousseau se diferencian claramente de otros de los filósofos de la Ilustración. De origen humilde y autodidacta en su educación, pudo encumbrarse en la fama gracias a su genio literario pero despreció la riqueza y la fama. Es el más radical de los pensadores del siglo XVIII y no comparte la fe en el progreso de la civilización que caracterizó a la Ilustración. Su principal obra fue “El contracto social” libro en el que expone sus ideas políticas.
Para Rousseau el hombre nace libre en un estado de naturaleza, donde vive como un salvaje, pero es un salvaje feliz. Vive con independencia respeto a los demás hombres. Pero la necesidad de conservación obliga a los hombres a abandonar su independencia y libertad absoluta para unirse y vivir en sociedad. Se produce entonces el contrato social, o sea los hombres renuncian a su libertad total y obtienen una libertad convencional que se rige por las leyes. Los hombres viviendo en sociedad forman el soberano que es el que tiene que hacer esas leyes.
Rousseau define a la soberanía como la voluntad general dirigida a obtener el bien común. Esa voluntad general se expresa a través de las normas creadas para permitir una mejor convivencia entre los hombres. Por lo tanto el soberano es el conjunto del pueblo y no el gobierno. La soberanía, o sea la voluntad general, la voluntad del pueblo, no se puede enajenar, ni se puede delegar en otros, por lo tanto no cree que el gobierno representativo sea adecuado: nadie puede representar al pueblo. La soberanía es indivisible, porque el interés del pueblo es uno sólo, por lo tanto Rousseau no está de acuerdo con la división de poderes. El poder ejecutivo lo que hace es aplicar la ley pero la ley sólo puede hacerla el soberano.
Para Rousseau el rey y el parlamento al estilo inglés no representan al soberano. Los gobernantes son sólo “comisarios” del pueblo, o sea hacen una comisión en nombre de aquel. “Cuando un pueblo se da representantes deja de ser libre” sostiene. A diferencia del inglés Locke, considera que el gobierno no surge del contrato social ni es parte de él. El pueblo debe gobernarse a si mismo. El gobierno debe ejercerse directamente por los hombres, como se hacía en la antigüedad. Rousseau ve con nostalgia las comunidades rurales pequeñas donde los hombres se reunían bajo un árbol a decidir su organización.


Pero para eso se necesitan estados pequeños que no sean más grandes que una aldea y hombres que no sean ambiciosos. Rousseau observa que esa no es la realidad. El progreso, la civilización, la ambición, el egoísmo, han corrompido al hombre. En procura de obtener dinero los hombres se ocupan de sus asuntos personales y se desinteresan de los asuntos públicos delegando la soberanía en otros.
Sin embargo Rousseau no cree que se pueda volver a la época anterior al contrato social, al estado de naturaleza, del salvaje feliz. “No podemos quemar las bibliotecas y volver al bosque junto a los osos” señala. Por lo tanto se debe hacer un nuevo contrato o llegar a una forma de vida lo más parecida posible al período inmediatamente posterior al contrato.

LAS NUEVAS IDEAS ECONÓMICAS
En el transcurso del siglo XVIII algunos autores formularon nuevas ideas sobre la generación de la riqueza. Se destacan los franceses Quesnay y Gournay que pertenecían a la fisiocracia , y el inglés Adam Smith.

LOS FISIÓCRATAS
La Fisiocracia es un mezcla de liberalismo económico y de despotismo ilustrado. Sus ideas giraban en torno a cuatro temas: la naturaleza, la libertad, la tierra y el despotismo legal.
Los fisiócratas creían en las la existencia de leyes naturales que regían no sólo la naturaleza sino la sociedad y la economía. Sostenían que el hombre recibía de la naturaleza la propiedad exclusiva sobre su persona y también de las cosas que pudiera adquirir mediante su trabajo y esfuerzo.
Para ellos la forma más autentica y representativa de la propiedad es la propiedad de la tierra; consideraban quela agricultura era la única actividad generadora de riquezas y por lo tanto los dueños de las tierra son los únicos que pueden enriquecer al país.
Los fisiócratas son contrarios a toda reglamentación de la economía por parte del estado. Una reglamentación puede afectar el normal desarrollo de la leyes naturales; las leyes humanas sólo deben reconocer y expresar las leyes naturales. Su fórmula es “laissez faire, laissez passer” ( dejar hacer, dejar pasar).
Eran partidarios de la monarquía absoluta, donde el rey tenía una autoridad superior y por encima de los intereses de los particulares. El rey debía regirse por las leyes naturales tratando de no entorpecer su cumplimiento inevitable.
Quesnay se interesaba sobretodo por la agricultura y dio origen a la corriente de pensamiento que se llamó fisiocracia, o sea gobierno de la naturaleza. Para Quesnay la tierra era la única fuente de riqueza, porque el cultivo de la tierra produce todo aquello que puede desearse. Los agricultores son los únicos a quienes realmente puede llamarse productores; cuando él hablaba de agricultores no se refería a los trabajadores sino a los propietarios de las tierras. Estos no deben ser molestados por ninguna traba de parte del estado, quien no debe fijar precios a los productos agrícolas y debe dejar que los productos circulen libremente. Sostiene que no debe ponerse impuestos a la compra y venta de los productos de la tierra, sino al suelo.

EL LIBERALISMO ECONÓMICO: ADAM SMITH
Adam Smith (1723-1790) expresó en sus libros el ideal de una clase social y de un país en plena expansión: la burguesía inglesa.
Smith conoció el pensamiento de los fisiócratas en un viaje realizado a Francia. Adhirió a sus ideas básicas, peró les dió mayor profundidad y rigor científico. Para los fisiócrats la fuente de riqueza era la agricultura. Para Adam Smith el que genera riqueza es el trabajo, sea aplicado a la agricultura o a la industria o la pesca, etc. En su principal obra escrita “La riqueza de las naciones”, dedica varios capitulos a analizar y describir la forma en que el trabajo es más eficiente y por lo tanto capaz de crear más riqueza. Consideraba que la división del trabajo y la especialización de cada uno en una tarea determinada aumentaba la eficiencia.
Para los fisiócratas los agricultores constituyen la principal clase porque lo que ellos hacen es la única producción de cosas que permite el bienestar del resto de la sociedad. Para Smith en la sociedad hay diversas clases de productores que son interdependientes: el agricultor libera al artesano de la tarea de producir alimentos (el artesano se los compra), pero a su vez el artesano libera al agricultor de tener que fabricar herramientas, muebles o vestidos (el agricultor se los compra).
Para Adam Smith existe un orden natural como también creían los fisiócratas, pero ese orden natural tiene una causa psicológica: los hombres buscan el placer, el bienestar personal y hacen todo aquello que los proporciona ese bienestar. Cuando el hombre actúa en la sociedad o con móviles económicos lo hace procurando su bienestar individual. La suma de los intereses particulares lleva a la existencia de un interés general y el bienestar individual lleva al bienestar colectivo. Por eso el gobierno debe abstenerse de dirigir la economía: debe dejar que los individuos se muevan por su cuenta, guiados por su interés personal. El estado sólo debe dedicarse a mantener el orden, hacer respetar las leyes, proteger la propiedad privada y facilitar la producción.
Por lo tanto no se debe limitar ni poner trabas a las actividades privadas. Debe dejarse en libertad de acción a los agentes económicos (productores, consumidores, empresarios, trabajadores) para que compitan entre ellos tratando de obtener cada uno el mejor resultado para obtener bienestar. La libre competencia se regula por las leyes naturales como la de oferta y demanda: la oferta es la cantidad de bienes disponibles; la demanda la la suma de necesidades a cubrir. Cuando la demanda es mayor que la oferta aumenta la compra de productos, aumentan los precios; cuando hay más oferta que demanda se da el proceso contrario, hay mas interés en vender y los precios bajan.
Estas ideas serán la base ideológica del liberalismo económico del siglo XIX y del neoliberalismo del siglo XX.

EJERCICIOS

En especial, el absolutismo tuvo mucha importancia en tres países europeos:
- En España, ¿debido a que se desarrolló como un imperio? 
- En Francia, ¿por qué allí el Absolutismo tuvo su máximo desarrollo y se convirtió en modelo para los otros países?. 
- En Inglaterra,¿ porque allí se encuentra la primera fórmula alternativa a esta forma de gobierno?,¿ que es el Parlamentarismo? 

ACTIVIDAD:

 

  1. Realizar una tabla comparativa como la de abajo y completarla con las características de cada idea:
ABSOLUTISMO MONÁRQUICO LIBERALISMO POLÍTICO






 


  1. Realizar una tabla comparativa como la de abajo y completarla con las características de cada idea:
MERCANTILISMO FISIOCRACIA LIBERALISMO
ECONÓMICO






   


  1. ¿Qué son los derechos de una persona?.
  2. ¿Se cumplen tales derechos en la actualidad de nuestro país?
  3. Si todos los países del mundo fueran Mercantilistas (protegen sus economías limitando la importación) ¿favorecería los intereses de los países desarrollados? ¿por qué?.
  4. Resolver la siguiente hipótesis: “El Liberalismo Económico favorece la economía de los países subdesarrollados”.




  

  

  


  


  


   




















 
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